Fecha

18 de diciembre de 2020

Autor

Revée

Etiquetas

¿Notas que el parto ha dejado huella y recuerdas con nostalgia el cuerpo que tenías antes de quedarte embarazada? Primero, que sepas que estás en buena compañía; así es para muchas mujeres como tú.

Por eso, hoy queremos compartir contigo el testimonio de Raquel, de 39 años, madre de dos maravillosos gemelos.

Aunque siempre ha sido una aficionada al deporte, sufrió una diástasis abdominal durante el embarazo. Este fenómeno —del todo natural durante esta época— consiste en la separación de la musculatura abdominal. Sin embargo, en su caso, la recuperación posparto tardaba más de lo esperado y Raquel se avergonzaba de su aspecto físico.

Por eso, tomó la decisión de someterse a una abdominoplastia, una intervención quirúrgica que le devolvió la confianza en sí misma y de la que no se arrepiente en absoluto.

¡No te pierdas la entrevista!

Raquel, ¿qué motivos te llevaron a optar por la abdominoplastia?

Las razones son variadas. En primer lugar, una razón de salud: mi embarazo de Sergio y Marco fue gemelar y el parto, por cesárea. Desafortunadamente, no pude deshacerme de la diástasis abdominal después del embarazo, ni siquiera con la ayuda de un fisioterapeuta y ejercicios específicos.

La segunda razón es estética. Tras dar a luz, perdí 21 kg en alrededor de un año, lo que se tradujo en un desagradable exceso de piel en la zona de la barriga. La operación bikini se convirtió en un trauma: estuve avergonzándome de mi cuerpo y evitando ir a la playa, o al menos destaparme, durante varios años. Tras el embarazo comencé a hacer mucho deporte. Sin embargo, no me sentía segura con la diástasis, por temor a empeorar la situación. Por ello, un año y medio después de dar a luz, acudí a un médico.

En retrospectiva, ¿volverías a someterte a una abdominoplastia?

Sin lugar a dudas. Tengo que decir que quedé muy satisfecha con la intervención. Sin embargo, quiero ser honesta: al principio tenía muchas dudas porque me preocupaba mucho la recuperación postoperatoria. Durante este período, de hecho, no pude levantarme de la cama, lo que no es muy compatible con tener dos niños pequeños; echaba de menos el deporte y mi rutina diaria.

Sin embargo, valió sin duda la pena: me encanta mi nuevo aspecto físico y sobre todo mi barriga.

La abdominoplastia no solo ha eliminado la acumulación de piel en exceso, sino también todas las estrías. Por lo tanto, el beneficio fue doble y pudimos matar dos pájaros de un tiro.

En cuanto a las cicatrices, tengo dos: una en el ombligo, que se ha curado muy rápido, y otra en la parte inferior del abdomen, que se está aclarando y es del todo simétrica. Esta última es fácil de esconder debajo del bañador o con la ropa interior, así que apenas me acuerdo de ella.

¿Has utilizado prendas postoperatorias adecuadas? ¿Te las recomendó el cirujano?

Sí, de cara al postoperatorio, el cirujano enseguida me informó de que sería fundamental llevar siempre prendas de compresión para no comprometer los resultados de la abdominoplastia. Investigué mucho por Internet y, efectivamente, hay un gran consenso al respecto.

Cuando se trata de diástasis abdominal, la recuperación postoperatoria es muy delicada, por lo que elegir prendas adecuadas era más importante que nunca. En la clínica me dieron enseguida la faja abdominal de la marca Revée. Había leído que la empresa goza de una excelente reputación en el sector y ya entiendo el porqué: quedé muy satisfecha con los materiales, la comodidad y el nivel de compresión.

Para no quedarme sin prenda mientras la lavaba, decidí enseguida comprar otra faja igual, para garantizar una adecuada compresión las 24 horas del día, tal y como me aconsejó el médico.

¿Qué faja abdominal usaste en concreto después de la abdominoplastia?

La faja abdominal que me dieron en la clínica fue la faja postoperatoria Revée® Binder. Este modelo está disponible en dos alturas diferentes, para adaptarse mejor a cada cuerpo. Yo elegí la de 32 cm, por ejemplo. Es fácil de ajustar y poner gracias al sistema de doble banda en el abdomen. ¡La compresión siempre me ha parecido óptima y los resultados lo confirman! La ventaja de esta faja es que es sin látex, lo cual es clave para mí ya que soy alérgica.

Otro elemento importante relacionado con los materiales es que son muy transpirables, por lo que incluso en verano nunca me hicieron sudar. Usé esta faja postoperatoria durante tres meses sin interrupción después de la operación y, en los siguientes tres, solo cuando hacía deporte.

¡Me gusta tanto que será casi traumático entrenar sin mi faja de Revée!

¿Cuánto duró el postoperatorio?

Cuando me lo preguntan, siempre menciono mi primer paseo de 5 km un mes después de la intervención. Después, aumenté las distancias y, alrededor de tres meses tras la abdominoplastia, comencé a correr de nuevo poco a poco. Como contaba antes, siempre llevaba puesta la faja abdominal Revée Binder mientras hacía deporte, para evitar problemas y asegurarme de que la diástasis abdominal no volviera a llamar a mi puerta. Sin embargo, evité forzar la zona abdominal al entrenar los primeros 5-6 meses hasta que el médico y el fisioterapeuta confirmaron que la diástasis había desaparecido por completo y que estaba como nueva. En otras palabras, la recuperación postoperatoria fue rápida y sin problemas.

Faja abdominal postoperatoria

Raquel, ¿tienes algún consejo para otras madres que, como tú, contemplan someterse a una abdominoplastia?

Claro que sí. El primer consejo importante para quienes consideran someterse a una abdominoplastia es sin duda contar con un cirujano especializado en este tipo de intervenciones. Llegué a esta conclusión tras investigar mucho en Internet y consultar a varios médicos hasta que di con el adecuado.

En segundo lugar, recomiendo prestar mucha atención a la recuperación postoperatoria y no subestimar su importancia. Sé de muchas pacientes que no siguieron las recomendaciones del médico y que comprometieron parcialmente los resultados obtenidos con la intervención. En este sentido, es clave llevar siempre puestas las prendas de compresión, siguiendo las pautas del médico.

Además, con respecto a las cicatrices, usé un gel de silicona específico de la misma marca: Revée Scar Gel, que también me aconsejó el cirujano. Tengo que decir que las cicatrices han evolucionado genial, con un resultado mucho mejor de lo que pensaba.

Crema para cicatrices

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